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Cómo gestionar la ingesta: de un único flujo a varios ISO

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Cómo gestionar la ingesta: de un único flujo a varios ISO

Las expectativas de los consumidores en cuanto a contenidos de vídeo atractivos son más altas que nunca. El público quiere disfrutar de una amplia variedad de entretenimiento y, como está expuesto a un sinfín de opciones, cada vez es más difícil mantener su atención.

Cada vez son más las cadenas de televisión que optan por la producción multicámara, que puede ser una forma eficaz de crear contenidos visualmente más atractivos que con una sola cámara. La multiplicidad de ángulos ayuda a sumergir al público en la acción y ofrece más opciones de edición en la posproducción.

Pero la gestión de la ingesta de las secuencias producidas por una producción multicámara puede ser un proceso intensivo, sobre todo porque muchos equipos de producción ruedan ahora en altas resoluciones exigentes, como 4K y cada vez más incluso 8K. Esto significa que los flujos de trabajo de ingesta deben ser lo suficientemente robustos como para procesar lo que potencialmente podría sumar miles de horas de metraje de alta calidad. Con todos estos recursos audiovisuales procedentes de múltiples entradas de cámara ISO, es importante asegurarse de que los flujos de trabajo de ingesta sean lo más eficientes posible.

Además, para satisfacer la demanda, los medios de comunicación tienen que garantizar que la producción sea flexible y se ajuste a calendarios ajustados. Estos exigentes requisitos se amplifican cuando se comparten contenidos entre equipos que, cada vez más, adoptan flujos de trabajo remotos.

En este blog, hablaremos de tres procesos de ingesta diferentes y exploraremos las ventajas y limitaciones de cada uno para gestionar la ingesta, desde un único flujo hasta varios ISO.

Ingesta in situ basada en hardware

La forma tradicional de gestionar la ingesta mediante hardware in situ tiene muchas ventajas. La posibilidad de grabar sin problemas secuencias de alta calidad directamente en un disco duro y escalar fácilmente de un flujo único a una configuración multicámara. Pero esta opción presenta dos problemas fundamentales.

El primero es el coste. El hardware necesario para grabar grandes cantidades de metraje tiene un coste inicial elevado y no te permite ampliarlo más allá de sus capacidades sin comprar más hardware, lo que significa que a menudo tendrás que pagar más de lo que necesitas para estar seguro. En segundo lugar, su limitada flexibilidad. Si grabas en un solo lugar, puedes configurar el hardware y llevarlo fácilmente a tus editores in situ. Pero, ¿y si tienes una producción remota en la que el equipo de rodaje y los editores no están en el mismo sitio? Entonces tienes que llevar el hardware no sólo al lugar de rodaje, sino también al equipo de postproducción, con la consiguiente pérdida de tiempo.

Ingesta de transferencias en la nube

También puedes grabar todo el material en un disco duro y subirlo a un servicio de transferencia basado en la nube. De este modo, los editores podrán acceder a ellas desde cualquier lugar.

La nube ofrece la flexibilidad necesaria para trasladar los contenidos allí donde se necesiten. El proceso es sencillo y rentable, ya que sólo se paga por lo que se necesita, lo que lo convierte en una alternativa ideal a la ingesta basada en hardware. En última instancia, esto reduce el reto logístico y el coste de hacer llegar rápidamente los contenidos a los editores. Sin embargo, para que los editores puedan acceder a las secuencias ingestadas, sigue llevando tiempo subirlas a un servicio de transferencia en la nube. Por eso, aunque subir un solo flujo de imágenes puede ser bastante rápido, subir a la nube horas de material de alta resolución procedente de varios ISO a la vez lleva mucho tiempo. Estos retrasos repercuten en el programa de postproducción, ya que los editores tienen que esperar a que llegue el contenido.

Graba directamente en la nube

Imagina tener lo mejor del hardware in situ y de la nube sin los inconvenientes, y garantizar el acceso inmediato a tu equipo de edición. ¿Suena bien poder subir simultáneamente varios flujos de alta calidad al almacenamiento en la nube? Es posible evitar los costes y los problemas logísticos asociados a los sistemas basados en hardware y los largos tiempos de carga de las soluciones habituales en la nube.

Eso es exactamente lo que hace Capture2Cloud. Capture2Cloud elimina la necesidad de configurar y transportar grandes cantidades de hardware entre ubicaciones. Te permite subir tantas secuencias como necesites a una instancia de Cinedeck en la nube de AWS, utilizando solo un codificador. Esto ayuda a simplificar los flujos de trabajo de edición, moviendo las secuencias directamente de la cámara al servidor, y directamente al almacenamiento. Esto reduce la complejidad del proceso de ingesta y ahorra un tiempo precioso durante la posproducción.

Grabar directamente en la nube significa que tus editores no tienen que esperar a que les llegue un disco duro o a que termine de cargarse una transferencia de archivos basada en la nube para ponerse a trabajar. En su lugar, pueden empezar a editar el contenido de calidad completa de inmediato, todo dentro de la nube.

Con Capture2Cloud puedes gestionar eficazmente la ingesta con escalabilidad, desde flujos ISO individuales a múltiples. Al capturar contenidos directamente en la nube para su edición y distribución, puedes garantizar la máxima eficiencia sin sacrificar la calidad. Más información sobre Capture2Cloud aquí.